Vuelve a amanecer otro Veintidós de Mayo distinto en barrio de San Gil….
Ya van dos años seguidos en los que las puertas de San Gil no se abrirán a la espera de que la plaza se llene de esperanzados quiterios por ver salir a su patrona.
Este año todos los quiterios vivimos con resignación la llegada de una fecha tan señalada. La resignación es ese sentimiento que en estos días nos invade y define el sentir de todo el barrio.
Resignación al no ver las calles llenas de música y alegría…
Resignación al no poder compartir estos días con familiares y amigos que nos han dejado en un año tan fatídico…
La resignación al comprobar la larga espera que todavía nos resta para poder ver a nuestra querida Santa recorrer las calles del barrio…
Pero este Veintidós de Mayo también es un día de esperanza,
de San Gil al santuario,
y a la Santa le pedimos
por todo este vecindario…”
Este año, el sentimiento quiterio nos hará recorrer el camino que nos separa desde cada punto del barrio hasta llegar a la Merced con la esperanza de encontrar el consuelo y el refugio que solo Santa Quiteria nos brinda al final del camino.
La esperanza de pronto volver a disfrutar de la alegría en la calle, de galopeos, de procesión, de dulzaina y de tambor, de dianas y limonás…
La esperanza de saber mantener un legado y una fe inculcados y heredados generación tras generación, y la esperanza de que el próximo año podamos volver a ver a nuestra Virgen y Mártir Quiteria salir de su ermita en procesión.
Por eso, en este Veintidós de Mayo la devoción de todo un barrio busca en Santa Quiteria su intercesión por volver a disfrutar de fechas tan señaladas. Mientras tanto, esperaremos pacientemente la venida de nuestros mejores días y de nuestros corazones quiterios saldrán hoy y siempre esas vivas que nos llenan de emoción.
¡VIVA EL BARRIO DE SAN GIL!